Wright no se contiene al describir a la estrella pop como alguien que está “entregando” a sus hijas a la cruel industria del entretenimiento. En su crítica, señala que es inquietante que Beyoncé, quien sabe de primera mano los peligros de la fama, esté empujando a sus hijas hacia el mismo camino que ella recorrió. “¿Dónde están sus instintos maternos?”, cuestiona Wright, destacando que Blue Ivy, a solo 12 años, ya está expuesta a un mundo que puede ser devastador.