**El Olvido Duele: Anabela Ascar, de Estrella a Sombra en la Clínica**
La emblemática figura de la televisión argentina, Anabela Ascar, ha vuelto a ser noticia, pero no por su brillante carrera ni por un regreso triunfal, sino por un episodio que resuena con la cruel realidad del olvido en el mundo del espectáculo. A sus 70 años, Anabela fue vista en una clínica del barrio de Belgrano, donde su actitud de, aparentemente, colarse en la fila desató una ola de críticas en redes sociales. La imagen de quien alguna vez fue sinónimo de noticias impactantes ahora se ha transformado en un símbolo de la indiferencia y el desprecio que puede sentir una estrella caída.
Anabela, que brilló en Crónica TV con su estilo único y su capacidad para conectar con el público, ha estado ausente de la pantalla durante años. Su voz, que una vez resonó en los hogares argentinos, se ha apagado, y su nombre se ha convertido en un eco distante en la memoria colectiva. En un tiempo donde su presencia era fundamental, ahora es recordada por escándalos menores y por su lucha por encontrar trabajo en una industria que parece haberla olvidado.
El incidente en la clínica no solo revela un momento cotidiano, sino que también expone la dura realidad de una mujer que, como muchas otras, ha sido relegada al olvido. Los comentarios en redes sociales reflejan una sociedad que se alimenta del escándalo y que, al mismo tiempo, olvida rápidamente a aquellos que una vez fueron relevantes. La crítica hacia Anabela puede ser vista como un espejo de nuestros propios miedos: el temor al olvido y la soledad que acompaña a quienes ya no brillan en el firmamento mediático.
Hoy, mientras los reflectores la apuntan por un gesto criticado, la historia de Anabela Ascar se convierte en una advertencia sobre la fugacidad de la fama. La pregunta que queda en el aire es: ¿será posible que la industria del entretenimiento vuelva a darle una oportunidad a quien una vez fue una estrella? La esperanza es que, más allá de las críticas, alguien reconozca su talento y la llame de nuevo, no para homenajes, sino para que retome su lugar en la televisión que tanto ama.