¡LO QUE VIO EL FORENSE FUE DESGARRADOR! La muerte de Ernesto Barajas, un querido músico, ha sacudido a la comunidad y dejado un rastro de dolor y confusión. El médico forense, al examinar el cuerpo, no pudo contener su horror: “Esto no fue un crimen común, esto fue un mensaje”. Las marcas de brutalidad en el cuerpo de Barajas, con contusiones y heridas de bala, revelan la ferocidad del ataque que truncó su vida de manera violenta.
La escena en el laboratorio forense era escalofriante. Las extremidades rígidas de Ernesto y su rostro marcado por la violencia contaban una historia desgarradora. Su esposa, Alexis Sillas, y un acompañante sobreviviente, aún tembloroso, se encontraban en estado de shock, enfrentando la realidad de una pérdida inimaginable. El forense, con cada observación, documentaba no solo las heridas físicas, sino el trauma emocional que esta tragedia había dejado en quienes lo amaban.
La noticia de su muerte se esparció como un incendio. Amigos, familiares y seguidores se congregaron para rendir homenaje a un hombre que había alegrado tantas vidas. Alexis, con lágrimas en los ojos, sostenía recuerdos mientras el ambiente se llenaba de un luto palpable. Los relatos de quienes lo conocieron, mezclados con la desesperación del acompañante sobreviviente, pintaban un cuadro de horror y admiración.
Cada palabra, cada lágrima compartida, resonaba con la intensidad de la pérdida. La comunidad se unió en un grito silencioso por justicia, mientras el impacto de la violencia se sentía en cada rincón del velorio. La vida de Ernesto Barajas, marcada por la música y el amor, se apagó de manera abrupta, pero su legado perdurará en los corazones de quienes lo conocieron.
La ceremonia final se acercaba, y con cada paso hacia el ataúd, el dolor se hacía más palpable. La violencia había robado una vida, pero no podía borrar el recuerdo de un hombre que dejó una huella imborrable. La memoria de Ernesto vive en cada lágrima, en cada historia, en cada abrazo compartido. La tragedia de su muerte es un recordatorio de la fragilidad de la vida y el impacto devastador de la violencia.
