En un mensaje claro y directo, la familia de Rubby Pérez ha localizado a aquellos que han compartido la polémica fotografía y les otorgan 48 horas para que eliminen dicho contenido. “Consideramos que es una violación grave a la dignidad humana y al respeto hacia su familia”, subrayan en su comunicado. La advertencia es seria: cualquier uso no autorizado de su nombre, imagen o voz enfrentará acciones legales sin excepción.