**Rachel Zegler en el Ojo del Huracán: Productores Consideran su Reemplazo en “She Gets It from Me”**
Hollywood está en estado de alerta: Rachel Zegler podría ser reemplazada en su papel protagónico de “She Gets It from Me” mientras la producción se tambalea en medio de un caos sin precedentes. Fuentes internas revelan que la situación ha llegado a un punto crítico, y los productores consideran seriamente la posibilidad de prescindir de la joven actriz, quien ha estado en el centro de la controversia tras su tumultuosa participación en “Snow White”.
Los rumores indican que el ambiente en el set se ha vuelto insostenible. Zegler, conocida por su actitud desafiante y sus recientes publicaciones en redes sociales, ha generado un clima de tensión que ha llevado incluso a un coprotagonista clave a abandonar el proyecto. Las exigencias de Zegler, que incluyen cambios en el guion y un enfoque desmedido en su personaje, han enfurecido al equipo, que siente que su profesionalismo está siendo socavado.
“El set se ha convertido en un campo de batalla”, afirma un miembro del equipo, describiendo un entorno donde las tensiones son palpables y la colaboración se ha vuelto imposible. La reputación de Zegler ha sufrido un golpe tras otro, y sus acciones han puesto al estudio en una situación legal compleja, ya que sus comentarios en redes sociales podrían haber violado acuerdos de confidencialidad.
Mientras los rumores de un recasting aumentan, la presión sobre Zegler crece. Algunos productores sugieren utilizar dobles para minimizar su presencia en pantalla. Sin embargo, el impacto financiero de reemplazar a una protagonista en medio de la producción es inmenso y podría llevar a una reestructuración completa del proyecto.
La comunidad de Hollywood observa expectante: ¿será este el final de la carrera de Zegler o podrá revertir la situación? Con su futuro en la cuerda floja, la actriz se enfrenta a un dilema crucial: encontrar un equilibrio entre su autenticidad y la profesionalidad que la industria exige. La historia de Rachel Zegler está lejos de terminar, y el reloj está corriendo.