Un escándalo sacude el mundo del espectáculo cubano tras la filtración de un video en el que se muestra a Paulito FG en estado crítico en el Hospital Calixto García. Este impactante material, que ha desatado una ola de indignación, revela que la enfermera que grabó y difundió las imágenes ha sido despedida y vetada de cualquier trabajo en el sistema de salud pública cubano. La acción fue rápida y contundente, un claro mensaje de que el respeto por la dignidad de los pacientes es innegociable.
Las imágenes, que capturan un momento vulnerable del célebre salsero, fueron publicadas sin consideración alguna por parte de la técnica de electrocardiograma, lo que ha generado un intenso debate ético en la sociedad. Según fuentes, esta trabajadora reconoció su responsabilidad y, además de perder su empleo, enfrentará severas repercusiones en su carrera profesional.
El director del hospital actuó con firmeza, solicitando al Ministerio de Salud Pública que la técnica no pueda ejercer en ninguna institución de salud en Cuba. Este acto de justicia ha sido aplaudido por muchos, quienes consideran que no se debe tolerar la exposición del sufrimiento ajeno por la búsqueda de likes o sensacionalismo.
Mientras tanto, la familia de Paulito FG se encuentra en un mar de emociones, lidiando con la pérdida de un ser querido en medio de un escándalo que ha puesto de relieve la falta de ética en algunos sectores de la salud. La indignación es palpable, y muchos exigen respuestas sobre la conducta de quienes estaban a cargo de cuidar al artista en sus últimos momentos. La situación sigue en desarrollo, y la comunidad espera que se tomen las medidas adecuadas para honrar la memoria de Paulito y proteger la dignidad de todos los pacientes.