**Colapso en vivo: Panelista de Pamela David deja América TV entre rumores de un ambiente tóxico**
Un impactante giro en la televisión argentina ha sacudido las redes y los pasillos de América TV tras la abrupta salida de un periodista del programa “Desayuno Americano”. En un episodio que dejó a todos boquiabiertos, el panelista decidió bajarse del programa en medio de un colapso en vivo, citando problemas de salud que, según fuentes cercanas, podrían estar relacionados con un ambiente laboral tóxico liderado por la conductora Pamela David.
El periodista, conocido por su carisma y presencia en pantalla, sufrió un pico de presión que lo llevó a requerir atención médica urgente durante una transmisión. Sin embargo, lo que se oculta tras este incidente son las tensiones acumuladas y el estrés extremo que, según allegados, han sido constantes en su día a día laboral. “Mi cuerpo me dio el mensaje de parar”, expresó, dejando entrever que su decisión no fue solo por motivos médicos, sino también por el desgaste emocional provocado por las actitudes hostiles en el set.
Los rumores de un clima laboral hostil han comenzado a circular con fuerza, sugiriendo que el panelista no es el único que ha padecido estos problemas. Técnicos y otros miembros del equipo han confirmado que el ambiente en el programa a menudo se siente opresivo, lo que ha llevado a cuestionar la responsabilidad de la conductora y la dirección del canal. Mientras tanto, América TV no ha emitido comentarios oficiales, y Pamela David ha optado por mantener el silencio ante las acusaciones.
Este escándalo no solo pone en tela de juicio la salud mental y física de los trabajadores de la televisión, sino que también reabre el debate sobre la normalización del estrés en el entorno laboral del entretenimiento. ¿Hasta qué punto el éxito de un programa puede justificar el sacrificio del bienestar de su equipo? Lo cierto es que esta situación ha generado una ola de preocupación y reflexión entre los seguidores del medio, quienes exigen un cambio en la cultura laboral. La salud debe ser prioritaria, y la comunidad de la televisión argentina está lista para alzar su voz.