Carolina del Norte se prepara para unas elecciones presidenciales históricas, donde el 57% de los votantes ya ha ejercido su derecho en la votación anticipada. A menos de 24 horas del crucial día electoral, Kamala Harris y Donald Trump se enfrentan en una contienda que podría ser la más reñida en la historia de Estados Unidos, con 93 votos del colegio electoral en juego. Según los últimos informes, casi 4.5 millones de votantes han depositado sus votos, lo que representa un 5% del padrón electoral.
Las autoridades electorales de Carolina del Norte han asegurado que, a pesar de los desafíos, incluida la devastación causada por el huracán Herlin, el proceso electoral sigue adelante sin contratiempos significativos. Con más de 2,650 centros de votación abiertos mañana de 6:30 a.m. a 7:30 p.m., se espera que más de un millón de votantes acudan a las urnas. Sin embargo, se advierte a aquellos que no han devuelto sus boletas de voto en ausencia que deben hacerlo en persona antes de la hora límite, o de lo contrario, perderán la oportunidad de que su voto sea contado.
La directora ejecutiva de la junta electoral ha instado a los votantes a actuar con civismo y respeto, recordando que la intimidación en los centros de votación es un delito grave. Las autoridades están en alerta máxima ante posibles amenazas, y se han implementado medidas de seguridad adicionales para garantizar un ambiente seguro durante la jornada electoral.
Con un clima político tenso y un nivel de participación sin precedentes, Carolina del Norte se convierte en un campo de batalla crucial que podría definir el futuro político del país. La cuenta regresiva ha comenzado, y la nación entera observa con atención mientras los votantes se preparan para hacer escuchar su voz en este momento decisivo.