🔴ÚLTIMA HORA🔴 La crisis en el Partido Socialista (PSOE) alcanza un punto de ebullición: exministros y altos cargos del partido han exigido la dimisión de Pedro Sánchez en una carta abierta, clamando que “¡se vaya ya para salvar al PSOE!” Este clamor resuena con fuerza en un momento crítico, donde la reputación del partido se tambalea y su futuro electoral se ve amenazado.
La carta, firmada por 38 figuras destacadas del socialismo, revela un profundo descontento con la dirección actual del partido. Estos exministros, que una vez fueron pilares del PSOE, sienten que las siglas que defendieron han sido “prostituidas” y “devaluadas”. La presión interna crece, y aunque algunos líderes actuales descalifican a los firmantes como “resentidos”, la realidad es que la desconfianza y la división están en su punto más alto.
La situación se agrava con las recientes declaraciones de figuras como Emiliano García-Page, quien ha expresado su preocupación por el rumbo del partido. Sin embargo, la falta de una respuesta contundente por parte de la cúpula socialista deja entrever una parálisis alarmante. La posibilidad de una rebelión definitiva parece inminente, pero aún no se ha materializado.
Con el desgaste de la imagen del PSOE y el riesgo de perder posiciones clave en las próximas elecciones, la urgencia por un cambio es palpable. La presión no solo proviene de los exministros, sino también de los propios miembros del partido que ven cómo su marca electoral se deteriora día a día. La pregunta que flota en el aire es: ¿quién se atreverá a romper la disciplina del partido y alzar la voz para poner fin a esta crisis?
Mientras tanto, el gobierno se enfrenta a un “incendio diario” que obstaculiza cualquier intento de gobernar efectivamente. La situación es crítica y el futuro del PSOE pende de un hilo. La pregunta no es si habrá un cambio, sino cuándo y cómo se llevará a cabo. La presión está sobre Sánchez y su equipo, y el tiempo se agota.