**Malena Guinzburg Desata Tormenta: La Humillación de Iván de Pineda Revelada al Aire**
En un giro inesperado que sacudió el mundo del entretenimiento argentino, la humorista Malena Guinzburg ha hecho estallar una bomba mediática al acusar al célebre conductor Iván de Pineda de humillarla durante una aparición en su programa. En una charla distendida en el canal de YouTube “Colorama”, Guinzburg no se contuvo y, con un tono irónico pero punzante, reveló que la estrella de “Pasapalabra” mostró una actitud despectiva hacia ella y sus compañeras.
La revelación, que rápidamente se volvió tendencia en las redes sociales, comenzó cuando Julio Leiva, el anfitrión del programa, preguntó qué ocurre en la sobremesa durante sus giras. Malena, acompañada de sus amigas humoristas, lanzó la primera piedra: “Iván nos detestó con el alma”, afirmando que su comportamiento era frío y distante. “Nunca vi una mina tan pelota asterisco da y mirá que viajé por el mundo”, añadió, insinuando que la mirada del conductor decía más que mil palabras.
El tono humorístico de la conversación no ocultó la incomodidad palpable que sintieron las humoristas, quienes, al parecer, no fueron bien recibidas en el set de Iván. “Nos aburre”, comentó Malena, desatando risas, pero también una reflexión sobre las diferencias entre su estilo desenfadado y la solemnidad del conductor.
La controversia ha generado una ola de reacciones en las redes, dividiendo a los fans entre quienes apoyan a Guinzburg y aquellos que defienden a de Pineda, considerado un ícono de la televisión argentina. “Lo que dijo Malena no es chiste, es la verdad disfrazada de humor”, comentó un usuario, mientras que otros defendieron al conductor, argumentando que su comportamiento es simplemente parte de su personalidad reservada.
Este episodio no solo ha puesto a Iván de Pineda en el centro de la tormenta mediática, sino que también ha abierto un debate sobre la elitismo en la televisión y las dinámicas de poder entre figuras públicas. Con cada nuevo comentario, la historia se enriquece, dejando claro que en el mundo del espectáculo, las apariencias pueden ser engañosas.