🔴 **URGENTE: El neurocirujano revela detalles impactantes sobre la operación de la “Locomotora” Oliveras**
En un giro inesperado y alarmante, el neurocirujano Alejandro Musquio ha compartido información crucial sobre la delicada situación de la exjugadora de hockey, la “Locomotora” Oliveras, quien fue sometida a una cirugía de emergencia tras sufrir un accidente cerebrovascular. La atleta, conocida por su energía y fortaleza, ingresó al hospital José María Cullén en Santa Fe hace exactamente una semana, y su estado de salud ha generado preocupación en todo el país.
Musquio explicó que Oliveras llegó con un edema cerebral severo, una condición que amenaza su vida al generar una presión peligrosa dentro del cráneo. A las 48 horas de su ingreso, los médicos se vieron obligados a realizar una craneotomía para aliviar esa presión y evitar que el edema causara daños irreversibles. “Era una cuestión de vida o muerte”, afirmó el neurocirujano, quien destacó que el cerebro, al estar encerrado en una caja rígida como el cráneo, no tiene espacio para expandirse, lo que puede resultar en una hernia cerebral fatal.
El hermano de Oliveras, Jesús, compartió que, a pesar de la gravedad de la situación, su hermana pudo comunicarse brevemente tras la cirugía, aunque con confusión y limitaciones en el movimiento. “Me quedé más tranquilo porque pude hablar con ella. Estaba un poco confusa, pero recordaba”, relató. Sin embargo, el médico advirtió que la recuperación será lenta y que cada hora es crucial. “Hay que esperar 10 días para saber si realmente está fuera de peligro”, agregó Musquio.
Los especialistas han señalado que el accidente cerebrovascular de Oliveras no solo se debe a factores de riesgo comunes como la hipertensión y la diabetes, sino también a un componente genético que puede haber pasado desapercibido. “Ella tenía una calcificación en la carótida cervical y no se había controlado adecuadamente”, explicó el neurocirujano, haciendo hincapié en la importancia de la atención médica regular, especialmente para quienes tienen antecedentes familiares de problemas vasculares.
La comunidad está en vilo, esperando noticias sobre la evolución de la “Locomotora”. La situación es crítica y cada minuto cuenta. Mientras tanto, los médicos continúan monitoreando su condición con un sensor de presión intragraniana, y se espera que en los próximos días se puedan obtener resultados más claros sobre su estado. La lucha de Oliveras es una llamada de atención sobre la fragilidad de la salud y la urgencia de la prevención en casos de accidentes cerebrovasculares.