**8 armas ucranianas que podrían detener a los invasores rusos**

En medio de la creciente amenaza del ejército ruso, que ha desplegado poderosas armas a las puertas de Ucrania, surge una lista de sistemas de armamento ucranianos que podrían cambiar el rumbo del conflicto. La situación es crítica y la defensa de Ucrania se basa en la efectividad de estos equipos.

Primero, el misil antitanque FGM-148 Javelin, uno de los sistemas más avanzados del mundo, capaz de destruir cualquier tanque de batalla ruso moderno. Este misil, conocido por su capacidad de “disparar y olvidar”, ha demostrado su eficacia en conflictos pasados, lo que lo convierte en un pilar fundamental para las fuerzas ucranianas.

Otro recurso vital es el FIM-92 Stinger, un sistema de defensa aérea portátil que ha sido utilizado con éxito en guerras anteriores. Su capacidad para derribar aeronaves a baja altitud lo convierte en una herramienta crucial para contrarrestar la amenaza aérea rusa.

Además, Ucrania cuenta con vehículos blindados BTR-4 y V1, que ofrecen una protección avanzada y están equipados con armamento letal. Estos vehículos son esenciales para las operaciones en el terreno y proporcionan movilidad y defensa a las tropas.

El sistema de misiles S-300V, que puede interceptar misiles balísticos y aviones enemigos, ha sido renovado por Ucrania para proteger sus instalaciones estratégicas. Este sistema puede destruir objetivos a distancias de hasta 400 kilómetros, ofreciendo una capa de defensa crucial.

Las fuerzas ucranianas también se benefician de los drones Bayraktar TB2, que ya han demostrado su capacidad para realizar misiones de reconocimiento y ataque, destruyendo posiciones rusas en el campo de batalla.

Con el nuevo T-84 y el misil MBT LAW, Ucrania está mejor equipada que nunca para enfrentar la agresión rusa. La combinación de estas armas, junto con el sistema RK-3 Corsair, que puede eliminar objetivos blindados en movimiento, refuerza la determinación de Ucrania de resistir.

La urgencia de la situación no puede subestimarse. Cada segundo cuenta mientras Ucrania se prepara para defender su soberanía frente a una invasión inminente. La comunidad internacional observa con atención, y el futuro de la región pende de un hilo.