**Es Noticia: Sánchez el presidente, Cerdán el “directivo”**
En un giro alarmante para el gobierno de Pedro Sánchez, se ha revelado que Santos Cerdán, su mano derecha y secretario de organización del Partido Socialista, se encuentra tras las rejas, vinculado a una trama corrupta que podría sacudir los cimientos de la política española. Hace dos años, Sánchez proclamaba una investidura esperanzadora, pero hoy enfrenta una crisis de confianza sin precedentes.
La situación se ha intensificado tras la decisión del Tribunal Supremo de mantener a Cerdán encarcelado, debido a su papel directivo en una organización criminal que operaba desde la sede del PSOE. Las acusaciones son graves: se sospecha que se repartieron millones de euros en sobornos relacionados con licitaciones de obras públicas. La corrupción, que ha manchado la imagen del partido, podría tener repercusiones devastadoras para Sánchez, quien ha intentado distanciarse de su excolaborador.
El gobierno, que ha luchado por mantener una mayoría legislativa, sufrió un duro golpe ayer al perder una votación crucial sobre un decreto antiapagones, con 183 votos en contra. Esta derrota no solo subraya la fragilidad de su posición, sino que también evidencia la creciente oposición dentro del propio Congreso, donde sus aliados tradicionales han comenzado a desmarcarse.
Mientras el PSOE intenta minimizar el impacto de la corrupción de Cerdán, la realidad es que la confianza en la administración de Sánchez está en picada. Con la legislatura en un punto muerto y la corrupción acechando, los españoles se preguntan: ¿puede realmente el gobierno de Sánchez sobrevivir a esta tormenta? La respuesta podría tener consecuencias irreversibles para la democracia en España.