LLUVIA DE DIMISIONES EN EL INDEPENDENTISMO CATALÁN: “IRREGULARIDADES Y AUTORITARISMO”
El independentismo catalán se encuentra en crisis. Una ola de dimisiones ha sacudido al Consejo de la República, la entidad parainstitucional creada por Carles Puigdemont en 2018, revelando profundas grietas internas y un clima de descontento creciente. Trece delegados territoriales, junto a miembros de diversas juntas rectoras, han decidido renunciar en bloque, denunciando irregularidades y un alarmante autoritarismo bajo la nueva dirección de Jordi Domingo.
Desde que asumió el liderazgo en febrero, Domingo ha sido objeto de críticas feroces. Los dimisionarios acusan a su administración de falta de transparencia y de haber despojado al Consejo de su esencia política. “Nos hemos cansado de denunciar todo tipo de irregularidades”, afirmaron en un comunicado contundente. La situación ha escalado, dejando al descubierto un Consejo que, lejos de ser un gobierno catalán en el exilio, se ha convertido en un órgano sin rumbo ni legitimidad.
La crisis ha sido exacerbada por la falta de un proyecto claro y la percepción de que el Consejo ha sido transformado en un “chiringuito” del independentismo, debilitado desde dentro. Las tensiones internas han llegado a un punto crítico, con voces disidentes que no cesan en su denuncia de la opacidad y prepotencia del liderazgo actual.
La relevancia política del Consejo ha disminuido drásticamente, especialmente tras el regreso de Puigdemont al liderazgo de Jun per Catalunya. La incertidumbre reina en el independentismo catalán, que enfrenta una de sus crisis más severas. La pregunta ahora es: ¿puede el movimiento recuperarse de esta tormenta interna antes de que sea demasiado tarde? La respuesta es incierta, pero el tiempo apremia.